viernes, 23 de septiembre de 2011

2011, EL AÑO 5772 JUDÍO


Desde Adán al 28 de septiembre de este año, al caer el sol, se celebran 5772 años. La suma de esta cifra es 21, lo cual significa el acceso desde el origen para iluminar a toda la creación. Este año que se inicia va a estar regido por eventos de la emocionalidad, por ello el libre albedrío tendrá que expresarse para bien escoger. Vamos a vivir acontecimientos de mucho impacto emocional, es necesario estar atentos para mantener el equilibrio.

Los números tienen un significado y forman parte de las fórmulas con las cuales se crearon las cosas. En este período disponemos de la fuerza divina para poder ejecutar nuestras realizaciones. El número 21 significa querido, es un año importante para desarrollar el amor y despojarnos del egoísmo, transformarlo en altruismo, donde nuestra mirada se dirija hacia el prójimo.

El número 772 equivale a la expresión: "en las tierras vivientes", por ello vamos a tener un año muy vital, tanto en lo individual como en lo humano, es un año dinámico, de muchos acontecimientos, muy beneficioso para nuestras vidas. También se asocia al sabbath: "Bendito el que crea el fuego", que significa que aún con la oscuridad, ÉL es el creador del fuego, nos da sabiduría y la expansión de la conciencia para recibir las bendiciones.

Esto, es de manera muy resumida, las palabras de Isaac Benzaquen, quien expone los significados de la celebración del Rosh Hashaná, el fin de año judío, quien augura un año movido por las emociones y una oportunidad fabulosa de ejercer el libre albedrío, escogiendo el equilibrio y tomando las decisiones más altruistas posibles.

Llama la atención que si Adán fue le primer hombre, nuestro padre más remoto, hayan pasado sólo 5772 años, los que nos separan de aquel especial momento. ¿Será que no estamos poniendo atención y no hemos entendido bien el contenido bíblico?.

Por otra parte, ya sabemos que la paleontología data la presencia del hombre sobre el planeta en 40.000 años, fundamentado en la teoría evolutiva.

Sin embargo, este debate o contradicción entre el evolucionismo y el creacionismo, no tiene que ser necesariamente irreconciliable, ya que pudiera ser que la especie humana, tal vez tenga diversidad de origen, y que ello sea tal vez la explicación de los diversos colores de piel, cabello y demás características físicas. 

El Antiguo Testamento cuenta que cuando Adán y Eva, fueron expulsados del Paraíso, tuvieron dos hijos, Caín y Abel, y al morir éste a manos de su hermano, Caín fue condenado a vagar por la tierra, no sin antes expresar su temor por la posibilidad de que lo mataran, lo cual fue resuelto por Jahvé, al colocarle una marca que impedía que fuese asesinado.

Cabe preguntarse que si ellos eran los primeros habitantes de la tierra, ¿quién podría matar a Caín que no fuera un animal?, por otro lado, Caín funda una comunidad y tiene hijos, ¿con quién?.

Esto no se explica en la Biblia. Hemos de considerar que muchos de los textos bíblicos son crípticos, y por ello su interpretación literal puede conducir a error. Por ello, no queda otra alternativa que pensar que la tierra ya estaba poblada de humanos.

Ante esta clara presencia de humanos en la tierra, anterior a la llegada de Adán, podríamos pensar en varias posibilidades:

1- Que estos humanos fueron creados por Jahvé como modelos previos, menos evolucionados constitucionalmente que Adán.

2- Que fueron modelos traídos de otros espacios siderales, para preparar la llegada de Adán y su estirpe.

3- Que fueron resultado de la evolución que la ciencia sostiene, y que en un determinado momento (hace 5772 años), la creación de Adán contenía un componente especial (que aún desconocemos), no presente en los otros.

4- Que la tierra era un patio trasero de otros planetas, desde donde provenían humanidades diversas, con fines diversos, y que con el tiempo alcanzaron un nivel de evolución suficiente como para requerir el estatus divino, que lograron a través de Adán.

Con estas hipótesis podríamos comprender muchas cosas, incluso explicarnos las diferencias externas que vemos en lo que se ha denominado raza. Tal vez estas diferencias pudieran explicar también una historia llena de eventos bélicos, dominación y esclavitud, a cargo de grupos que se apropiaron de la vida de los demás. Con estas posibilidades las teorías creacionista y evolucionista se complementan perfectamente. Sólo quedaría por despejar qué sentido tenía la creación del linaje adánico.

Esto me lleva a muchas interrogantes. Si Adán apenas tiene 5772 años, pareciera que su creación fue una decisión importante para el devenir humano. El Paraíso era un lugar protegido, tal vez en un espacio del áura de la tierra, pero tan cercano a ella como para que se facilitara la salida del mismo. Las puertas del Paraíso se abrieron para que saliera con Eva, después de haber transgredido la ley de Jahvé.

¿No será que esta raíz adánica de los judíos, -lo cual autodescriben como "el pueblo elegido"-, nos está diciendo que Adán fue un formato humano especial, por tener un componente divino dado por Jahvé, el cual se incorporó tardíamente al escenario terrenal, donde había una variedad de modelos humanos menos evolucionados, que los hacía desarrollar expresiones espirituales politeístas?.

Si lo vemos bien, aunque Adán hubiese sido moldeado en arcilla, era un ser espiritual, carecía de un cuerpo como el nuestro, porque habitaba en el Paraíso. Cuando come del árbol prohibido, es cuando se materializa, se siente desnudo, porque tiene cuerpo, sabe que está desnudo porque ya conoce la polaridad, siente frío, calor, comienza a sentir necesidad de vestido, de comida, antes se alimentaban de energía divina.

Esto hace suponer que entre la creación de la tierra y Adán transcurrieron millones de años. Que la creación previa se produjo en un determinado momento, dejando pendiente al hijo de Dios. Mientras, las especies evolucionaban hasta prototipos humanos, que crearon cultura, pero carecían del elemento espiritual, que fue proporcionado luego por Adán.

¿No será que esta diferencia de modelos humanos, ha sido la causa de las intensas persecuciones que ha sufrido la cultura judía?

¿Qué característica es esa que hace al linaje adánico diferente?

¿Será el Libre Albedrío?

¿Será la condición espiritual?

¿Será que los otros humanos que poblaban la tierra no estaban regidos por la Ley del Karma, porque no tenían esencia divina, y lo obtienen cuando el linaje adánico se mezcló con ellos?

¿Aquellos humanos que poblaban la tierra tendrían alma, o fue la unión con el linaje adánico la que les insufló el alma?

¿No será que esa idea que tenían algunos religiosos de la antiguedad sobre la carencia de alma, con lo cual descalificaban a quienes quisieran, estaba asentada en una realidad primigenia, típica de aquellos humanos que provenían del movimiento evolutivo, quienes al unirse con el linaje adánico adquirieron su condición espiritual?

¿Fue a partir de ese momento cuando se estableció el Plan de Dios, para iniciar "el regreso a casa", por la purificación que permite la vida terrenal, a través de la reencarnación?

Hay cosmovisiones que hablan de uniones entre Dioses y humanos. ¿No serían esos Dioses, los descendientes de Adán, ya insuflados de la energía divina de Jahvé, los que se unieron a los otros humanos resultantes de la evolución de la especies y carentes de divinidad?

Son muchas las interrogantes, hemos de pensar que Adán fue el primer hombre, pero no nos dijeron el primer hombre con qué característica. Puede ser que Adán es el primer hombre desde donde partió la evolución espiritual, que tal vez no tenían los otros habitantes de la tierra, ni las otras especies, ni los componentes del planeta.

Recordemos que Adán y Eva tenían prohibido comer del árbol del conocimiento del bien y del mal, y que si lo hacían la consecuencia era que morirían; es decir, que ellos no hubieran muerto nunca de haber obedecido. Aquí ya se vislumbra un atisbo de Libre Albedrío, porque Jahvé pone en manos de ellos la decisión de obedecer o desobedecer.

Este inicial libre albedrío, grotesco por no haber sido ejercido, débil por falta a de experiencia, y casi invisible por falta de significado, es puesto a prueba por la ingeniosa serpiente, quien le aclara a Eva que no morirán, sino que serán como Dios; pero... ¡Ser como Dios es ser eterno!.

¿Y entonces?, ¿no es el Árbol de la Vida el que provee la eternidad?, ellos no tuvieron tiempo de comer de este árbol, incluso no sabían de su existencia, pues ni siquiera se lo mencionaron en la prohibición.

Hemos de pensar que al desobedecer, ellos obtienen dos cosas:

1 - El conocimiento del bien y del mal, es decir, se incorporan al mundo, a la vida fuera del Paraíso, donde rige la polaridad, con la cual van a tener que sentir dolor y sufrimiento, para discernir entre los extremos. Pero, ¿con qué propósito tendrían que vivir esto?

2- Para ganarse una posición autónoma en su destino; con la vida fuera del Paraíso se ganan el derecho de iniciar su tránsito por el Árbol de la Vida, y con ello, el Libre Albedrío completo.  El linaje adánico podría verse como el linaje divino, el linaje espiritual, los hijos de Dios.

Hemos de suponer que esta condición no la tenían los humanos pre-adánicos, repartidos por la tierra.

Esta gran novedad, o primicia que trae Adán, le da a la tierra otro nivel, la eleva como entidad espiritual, y le da un sentido divino a los demás seres vivientes y a los elementos. No queda nada sin estar conectado a la gran presencia divina, causa de todas las cosas. Con Adán, Jahvé culmina su creación; termina por establecer un linaje propio. No en vano se ha dicho que Dios está dentro de nosotros. Más adelante, hacen 2000 años, Jesús se refería al Reino de Dios como un mundo que está cerca, porque está dentro de nosotros.

Es así como me puedo explicar estos cómputos arquelógicos, y las enigmáticas palabras bíblicas, que no concuerdan con lo determinado por la ciencia. Hemos tenido la idea de que el hombre ha evolucionado linealmente desde que apareció sobre la tierra, desconociendo que aún cuando los seres tengan cuerpo humano, podrían tener notables diferencias, por diferente procedencia, en este caso, un componente clave: la divinidad.